Los paros cardíacos provocan cada año alrededor de 50.000 muertes en Francia. Lo que equivale a alrededor de cien muertes por día. Según las últimas estadísticas, casi el 70% de estos accidentes ocurren en el hogar, mientras que el resto ocurre o en lugares públicos o en la vía pública. Por eso es importante tener los reflejos adecuados ante una complicación de este tipo.
Llame a los servicios de emergencia y verifique
Hay que recalcar que la supervivencia de una persona en parada cardiorrespiratoria depende muchas veces de las reacciones iniciales de las personas que la rodean en ese momento. Entonces, lo primero que debe hacer en tal situación es pedir ayuda. Para ello basta con marcar el 15 para contactar con el SAMU o el 18 para los bomberos. También debes decirle a la persona con la que estás hablando que se trata de un paro cardíaco.
Luego, mientras se espera que llegue la ayuda, se debe comprobar la respiración del paciente y al mismo tiempo liberar sus vías respiratorias. Primero, haga que se acueste boca arriba, sobre una superficie dura.
Ponte de rodillas y coloca una mano en la frente de esa persona. Luego le levantarás la barbilla con la otra mano antes de inclinar suavemente su cabeza hacia atrás. De esta forma podrás observar y escuchar si respira o no. Al mismo tiempo, comprobar si hay cuerpos extraños en su boca que puedan dificultar su respiración. Si usa dentadura postiza, quítela inmediatamente.
Insuflación y masaje cardíaco.
Luego podrás realizar algunas series de inflaciones. Dependiendo del paciente, es posible realizar ventilación boca a nariz, boca a boca o incluso mascarilla. En el caso de un paciente adulto, la reanimación boca a boca se debe realizar mediante mascarilla boca a boca.
Lo primero que debes hacer es pellizcar la nariz de la persona y taparle la boca con la tuya. Luego sople lentamente dentro de su boca. Respira profundamente y repite la operación varias veces. Tenga en cuenta que al insuflar, el pecho del paciente debe elevarse.
Luego controle su respiración. Si no respira, se debe realizar inmediatamente un masaje cardíaco. Coloque las manos, una encima de la otra, entre los dos senos de la paciente, es decir en medio de su pecho. Asegúrate de que tus brazos estén rectos verticalmente.
Luego, empuja rápidamente hacia atrás 4 centímetros antes de levantar las manos. Continúe alternando 2 respiraciones y 30 masajes cardíacos. Tan pronto como la persona recupere el conocimiento, respire o hable, se puede detener el masaje cardíaco. Simplemente acuéstelo de costado mientras espera que llegue la ayuda.
Usando el desfibrilador
Cuando una persona sufre repentinamente un paro cardíaco, es posible reiniciar el funcionamiento de su corazón mediante el uso de un desfibrilador automático. Además, este dispositivo empieza a estar disponible en todas partes: lugares públicos, aviones, trenes, etc. El objetivo de utilizar este dispositivo es detectar fibrilación, o más simplemente una contracción anárquica del corazón. Su uso también es bastante sencillo.
Primero, abres el desfibrilador y sigues las instrucciones de voz. A continuación, pegarás los electrodos al sujeto, es decir, uno debajo del seno izquierdo y otro debajo de la clavícula. Ahora es el momento de conectar el cable. Cuando este último está conectado, el dispositivo indica que está analizando la frecuencia cardíaca del paciente y que no se debe tocar al paciente.
Después de este escaneo de unos segundos, podrá elegir entre dos opciones. O la descarga recomendada cuando el dispositivo recibe una descarga o se ofrece a descargarla. Sólo tienes que pulsar el botón que parpadea. Nunca toque a la víctima. O shock no recomendado donde retomarás el masaje cardíaco.