Al contrario de lo que piensas y de lo que sugiere la creencia colectiva, la inteligencia no es un regalo del cielo que te dan en grandes o pequeñas cantidades al nacer, y con el que tendrás que arreglártelas durante toda tu vida.
Lo que revelan los estudios científicos es que nuestro nivel de inteligencia no está fijado al nacer y que puede evolucionar en función de las decisiones que tomamos en nuestra vida.
Aún más sorprendente, según un estudio científico de la Universidad de Stanford, las personas que creen que tienen potencial y que pueden mejorar con el trabajo y el aprendizaje son las que tienen más éxito en la vida y, por tanto, se vuelven más inteligentes.
Ahora que te has dado cuenta de que tus habilidades no están fijadas al nacer, es hora de ponerlo en práctica y ver qué puedes hacer concretamente para darle un buen impulso a tu cerebro y agudizar tu inteligencia:
1. Lee mucho
Y preferiblemente todos los días, conviértete en un adicto a la lectura, en una máquina de aprender. La lectura es fundamental, te confronta con nuevas ideas y abre las puertas al conocimiento de la humanidad. Prefiere libros que te proporcionen conocimientos útiles y prácticos a novelas y ficción.
2. No pierdas el tiempo
Es fácil llegar a casa, sentarse en el sofá y mirar televisión hasta que llega la hora de irse a la cama. Pero no te hará más inteligente. Aprovecha al máximo tu tiempo y Asegúrate de irte a la cama cada día más inteligente que cuando te levantaste por la mañana.. Para ello, dedica una o dos horas al día a leer e intentar aprender algo nuevo.
3. Toma notas
Reflexiona sobre lo que has aprendido y anota tus conocimientos. No es necesario escribir bloques grandes. Unas cuantas notas cada día serán suficientes para fortalecer tu cerebro y ayudarte a asimilar mejor la información que has encontrado.
4. Rodéate de personas más inteligentes que tú
“Dime quiénes son tus amigos y te diré quién eres”. Sea humilde y reconozca que otras personas son más inteligentes que usted. Pasa mucho tiempo con estas personas que tienen cosas que enseñarte y que te empujan hacia arriba.
5. Comparte y explica tus ideas.
Una buena forma de validar tus conocimientos es compararlos, compartirlos y explicarlos a los demás. Si no consigues transmitir tus ideas a los demás, probablemente sea porque no dominas del todo el tema.
6. Vive nuevas experiencias
Sal de tu zona de confort para hacer cosas que nunca antes habías hecho, conocer gente nueva y explorar nuevos horizontes. Crea un descanso de tu rutina diaria para encontrar fuentes de inspiración y nuevas ideas que alimentarán tu creatividad e inteligencia.
7. Aprende a controlar tus emociones
Si no controlas tus emociones, ellas acabarán controlándote a ti y tendrán un impacto negativo en tu cerebro y en tu forma de pensar. Se ha demostrado científicamente que el simple hecho de estar de buen humor mejora significativamente la creatividad de una persona. Por el contrario, estar ansioso y estresado drena energía del cerebro, lo que afecta negativamente a la memoria y la inteligencia. Por tanto, es fundamental mantener la calma y controlar las emociones en todas las circunstancias.
8. Sea disciplinado
La disciplina es una cualidad esencial que todo el mundo debería cultivar. La disciplina no se trata de ser más duro contigo mismo y someterte a todo tipo de limitaciones. Se trata de saber tomar decisiones y apegarse a ellas, fijarse metas, perseverar y no desviarse hasta alcanzarlas, resistir y no ceder a las distracciones y tentaciones. Sin disciplina, es poco probable que la inteligencia desplegada dé frutos.
9. Ejercicio
Un estudio científico sueco revela que Las personas que hacen ejercicio con regularidad obtienen puntuaciones más altas en las pruebas de coeficiente intelectual (coeficiente intelectual). La explicación radica en que estar en una buena condición física permite un mejor suministro de oxígeno al cerebro. Otros estudios científicos también han demostrado que pequeñas sesiones de deporte son eficaces contra el envejecimiento cerebral y protegen la memoria a largo plazo en las personas mayores.
10. Recuerda descansar y dormir bien
El cerebro necesita periodos de descanso para organizar la información aprendida y asimilarla mejor. Asegúrate de tener un sueño reparador y reparador para despertarte cada mañana con tu cerebro en su mejor momento.